La Responsabilidad Social, la Sustentabilidad y la Etica, son los Valores básicos para las

La Responsabilidad Social, la Sustentabilidad y la Etica, son los Valores básicos para las
En 1953, Howard R. Bowen definió a la Responsabilidad Social del Empresario como “…las obligaciones de los empresarios para seguir políticas, tomar decisiones o adoptar líneas de acción deseables en términos de los objetivos y valores de la sociedad”. ETICA Y SUSTENTABILIDAD: VALORES BASICOS PARA LAS EMPRESAS

14 de noviembre de 2011

La rotación de empleo y la Responsabilidad Social

Aunque parezca repetitivo y tautológico, el concepto de Responsabilidad Social es considerado todavía como una actitud y comportamiento hacia fuera de las empresas, o como mercadotecnia social, cuando debería darse primordial importancia a su papel hacía dentro de las empresas.

Lo anterior lo menciono por una información que se dio a conocer recientemente, la cual dice que en México al 56 por ciento del personal no le gusta su empleo, porcentaje que considero alarmante, ya que en otras palabras, un poco más de la mitad de los empleados no se sienten a gusto en el centro de trabajo en el cual se encuentran.

Con base en ese dato surgen al menos dos preguntas; ¿las directivas de las empresas están consientes de ese malestar de su personal? Y si lo saben; ¿Están haciendo algo al respecto? Y una pregunta adicional podría ser: ¿Cómo pueden hablar de Responsabilidad Social hacia sus stakeholders externos, cuando no saben, o no quieren hacer algo para atender a sus stakeholders internos, y que son ellos quienes dan a conocer al entorno la real situación interna de la empresa.

En cualquier caso, la empresa sigue siendo vista y considerada como un ente estricta y rígidamente económico, impersonal y que tiene como única y primordial función la obtención de utilidades.

El malestar del personal puede ser tanto por el salario obtenido y/o, por las propias condiciones de trabajo existentes, ya sea en una planta o en una oficina, lo cual tiene como consecuencia un divorcio entre los directivos y el propio personal, donde estos últimos se limitan a realizar la labor encomendada; en palabras concretas, “se ponen la camiseta pero no la sudan”, y no hay ninguna intención de hacerlo.

En este sentido, es común ver que la actividad diaria en muchas empresas, el tiempo se les va desafortunadamente en resolver problemas; problemas que son el efecto de situaciones que pudieron haber sido resueltas si fuera atendido mejor el personal en su área o lugar de trabajo.

Pero aún viendo esto desde el punto de vista económico, esa baja en la productividad es consecuencia de factores sociales y/o personales, que no son atendidos en forma adecuada, y que provocan también una elevada rotación de personal, creando así un círculo vicioso que ya es visto como una situación normal y rutinaria.

Por lo anterior, es necesario insistir que la concepción utilitarista de la empresa que viene desde el siglo XVIII, no debe seguir existiendo; que la empresa es algo mucho más grande, y eventualmente trascendente en la vida de mucha gente que labora en ella.

En este siglo XXI, con personal más calificado que como lo fue en al menos las dos centurias pasadas, no es posible que se siga pensando en viejos atavismos que quieren permanecer en estos nuevos tiempos presentes y futuros.

Ahora es necesario considerar al personal no solamente como el recurso humano, y verlo como persona en toda su dimensión, algo que es un factor clave y esencial en la real, sólida y verdadera Responsabilidad Social.

Seguiremos platicando …